FICHA DEL LIBRO
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Autor:
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David de Juan Marcos
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Título:
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El ladrón de vírgenes
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Editorial:
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HarperCollins
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Año de edición:
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2017
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Género:
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Narrativa
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ISBN:
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9788491390466
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Páginas:
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200
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Sinopsis:
Tras catorce años
de misteriosa ausencia, Andrés Pajuelo regresa a su casa con la idea de robar
una serie de valiosas obras de arte religioso en varias iglesias de la sierra.
Para esta empresa necesitará la ayuda de sus dos hijos, del melindroso prometido
de su hija y de un enigmático gigante experto en teología y en arte sacro.
Cuando todo parece listo para ejecutar el último y más lucrativo de los
expolios, la banda de ladrones es acusada de varios asesinatos. Para sorpresa
de toda su familia, Andrés reconocerá al instante su culpa ahorcándose en
público.
El ladrón de vírgenes reflexiona sobre las mentiras y
fabulaciones que encierra la religión al tiempo que pulsa la importancia de la
religiosidad en la condición humana.
Opinión personal:
Este ha sido mi
primer contacto con la obra de David de Juan Marcos pero no será la última, porque hace tan solo unos días llegó a casa "Lo mejor de las vidas"
su anterior publicación. No llegó sola, vino acompañada de una bonita
dedicatoria del autor y eso me hizo mucha ilusión. Cuando vi que la editorial
HarperCollins publicaba esta novela me atrajo su sinopsis al estar relacionada
con el mundo del arte y más en concreto con el expolio artístico. Gracias a la
lectura conjunta organizada por varios blogs, hoy os puedo traer mis
impresiones de este libro.
El ladrón de
vírgenes comienza con un prólogo que consigue engancharte a su trama. El pueblo
ha dictado sentencia, condenando a morir en la horca a Andrés Pajuelo, acusado
de haber degollado al sacerdote de la parroquia y ser sospechoso de la
desaparición de dos hermanas gemelas de 14 años a las que todo el mundo lleva buscando, sin descanso, desde hace varios
días. Después de este comienzo tan inquietante retrocederemos en el tiempo,
hasta cuando comenzó todo. Andrés Pajuelo vuelve quince años después de haberse
largado, supuestamente, a empuñar el fusil y defender la patria en Tánger.
Volvió como si nada, tras finalizar la guerra. Pero esta vuelta está marcada de
malos presagios y todos en el pueblo lo saben y le temen. Sus pretensiones son
las de reunir una banda de ladrones para el robo de tres tallas románicas del
siglo XII. Para ello contará con sus dos hijos y un misterioso personaje
experto en Teología e Historia del Arte. Como licenciada en Historia del Arte
que soy, ya os podéis imaginar con qué personaje he empatizado más. Un hombre
culto capaz de trasmitir valores y enseñanzas a nuestro joven protagonista
principal.
Cirilo,
el hijo pequeño de Andrés, es el encargado de la narración en primera persona,
haciendo partícipe al lector de los hechos que causaron tanta desdicha a un
pueblo entero. Lo primero que me sorprendió de esta novela fue encontrarme con
una prosa poco habitual en este tipo de historias. Una prosa poética y rica en
matices, con frases cargadas de cadencia y musicalidad que le iría de fábula a
una novela de corte intimista y no a esta historia que contiene ligeras
pinceladas de misterio. Creo que el autor ha arriesgado mucho al emplear este
estilo tan ostentoso, en el que no se marcan los diálogos de sus personajes, y un léxico tan pulcro porque ralentiza el ritmo narrativo
tornándolo en pausado, lo que invita forzosamente a una lectura sin
prisas, para poder captar al completo las sensaciones que trata de
transmitirnos. De ahí que no sea una novela apta para cualquier lector.
Son varios los
temas que se van sucediendo en esta novela, aunque el eje central sea el del
expolio de arte sacro. También se abordan las mentiras que esconden las
religiones, la condición humana que lleva al fanatismo religioso y sobre
todo el arte. La combinación de todos ellos, así como algunos giros argumentales inesperados, dan como resultado una lectura entretenida.
He de reconocer que la lectura de esta novela no ha resultado ser tan adictiva
como pensaba porque hay momentos en los que la tensión se esfuma, pero he
disfrutado con ella y, en general, me ha parecido interesante.
Otra habilidad
del autor es que deja en un segundo plano la ubicación de los hechos. Los
acontecimientos se podrían estar desarrollando en cualquier pequeño pueblo de
la península. No percibes esa falta de información geográfica, no la echas de
menos porque en realidad no importa, ya que las supersticiones, las venganzas,
el odio y las mentiras están presente allí donde el hombre esté. David de Juan ha
conseguido plasmar a la perfección esa atmósfera rural lúgubre y asfixiante de un
pueblo reprimido y miserable, haciéndonos partícipes del odio que impregna el
ambiente y que es capaz de traspasar sus páginas, pudiéndose cortar con cuchillo.
Las escasas 200 páginas de esta novela se encuentran estructuradas
en tres grandes bloques, y estos a su vez en capítulos que carecen de
numeración pero se encuentran encabezados por una palabra en árabe coránico que
hace referencia a los números ordinales. El autor hace patente lo fácil que resultaba expoliar en nuestro país y la despreocupación por el patrimonio artístico. A pesar de que
existe una mayor sensibilidad y concienciación en la sociedad y las
instituciones, aun hoy en día nuestro patrimonio es objeto de robos y saqueos
indiscriminados. Hubo un tiempo en que por nuestras fronteras salían carros
cargados con obras artísticas compradas a un precio irrisorio o incluso
robadas. Por fin, en 1985 se aprobó la Ley de Patrimonio Histórico Español, una
ley muy necesaria para evitar el expolio. En aquellos tiempos no existía ningún
inventario o catálogo de los bienes de la iglesia, y era muy usual el tópico del
cura que malvendía unos objetos artísticos valiosos de su parroquia con el fin
de financiar reformas en los templos que estaban a su cargo o de darle de comer
a un pueblo que pasaba hambre.
En resumen, El
ladrón de vírgenes es una obra difícil de catalogar porque en ella se combina la aventura con la novela histórica y además contiene ligeras pinceladas de
misterio e intriga. Queda demostrado el talento de su autor al emplear un lenguaje rico y armonioso, creando una novela con una cuidada estructura y un estilo fastuoso, con grandes dosis de lirismo que pueden ralentizar su
lectura y en la que hay cabida para las supersticiones, las venganzas, el odio
y las mentiras. Una historia que te invita a la reflexión sobre el daño que
puede causar la religión en la condición humana.
Y como siempre digo: esta es la opinión de una simple amante de la lectura, no de una crítica literaria.
Su autor:
David de Juan Marcos es licenciado en Biología por la
Universidad de Salamanca y máster en Gestión y Conservación de la Naturaleza y
en Desarrollo Sostenible. Actualmente es
profesor de educación secundaria e imparte clases de ciencias y de inglés. En
su faceta literaria ha visto premiados y publicados la mayoría de sus relatos,
entre los que podemos encontrar Mi niño viejo (Premio Internacional de Relatos
Cortos Cruzando Culturas), En 2005 es becado por la
Fundación Antonio Gala para Jóvenes Creadores y allí comienza a escribir su
ópera prima, El baile de las lagartijas, galardonada con el Premio
Internacional de Novela Ciudad de Valencia Vicente Blasco Ibáñez. Una poderosa
novela que le ha valido la comparación con genios como García Márquez y le ha
augurado una exitosa y dilatada carrera literaria.
La prosa de David es una maravilla pero es verdad que es para leer poco a poco y no apta para todo el mundo. Ya verás como en si anterior novela es mucho más poética y que en ese caso si que es una novela intimista a la que le va como un guante
ResponderEliminarMarina, te imagino disfrutando de esta novela por los matices que comentas. Esta genial que añadas que su prosa lírica no es para todos los públicos pero creo que a mí me puede gustar y tampoco es una novela larga.
ResponderEliminarBesitos
Este tipo de historias me suelen gustar mucho pero esta no me llama demasiado, ese tipo de narración en vez de atraerme como que me da pereza ahora mismo, será racha.
ResponderEliminarUn beso!
Aunque sé que la disfrutaría ahira necesito oteo tipo de libros. Bonita reseña
ResponderEliminarEste sí que no es para mí.
ResponderEliminarUn beso :)
A pesar de las buenas opiniones sobre la prosa del autor, creo que no es una lectura que disfrutaría como vosotras. Este lo dejaré pasar.
ResponderEliminarBesos
No pensaba que fuera así cuando vi la portada, pero me lo apunto de cabeza y sin dudarlo. Me has convencido con tu reseña ^^
ResponderEliminar¡Hola! ^^
ResponderEliminarLo último que me apetece leer ahora mismo es novela histórica. Es un género que normalmente no suelo leer mucho, solo de vez en cuando, pero me ha llamado la atención el título y el argumento de este libro. Me parece interesante el tema que toca, así que me lo apunto y ya le llegará el turno. Creo que podría gustarme.
Besos!
Pues ya sabes que a mi me ha gustado mucho y desde luego es una lectura para ir despacio, saboreando la prosa del autor.
ResponderEliminarBesos
La prosa del autor me pareció bellísima en El baile de las lagartijas, pero no estaba yo muy poético por aquel entonces y abandoné la lectura. Con este libro, o con el anterior, podría quitarme la espinita.
ResponderEliminarUn besito.
¡Hola!
ResponderEliminarTiene muy buena pinta el libro la verdad, ¡Nos lo apuntamos!
Un saludo desde http://elgatoconlibrosaj.blogspot.com.es
Vaya pedazo de reseña te ha quedado, se nota lo mucho que te ha gustado y creo que has sabido plasmar muy bien las sensaciones que todos tuvimos con la novela.
ResponderEliminarBesos.
Acabo de leer otra reseña de esta novela, y la tendré en cuenta para más adelante :)
ResponderEliminarBesos!
Le tengo muchas pero que muchas ganas, pero de momento me tendré que aguantar algo más, porque no está en mis manos aún, jooooo.
ResponderEliminarTe ha quedado una reseña divina!!!
Un besito, reina mora!
Yolanda.
Este libro no me llamaba la atención pero tras ver varias reseñas sí lo ha hecho la prosa del autor, aunque creo que de estrenarme con él lo haría con su anterior libro.
ResponderEliminarUn beso
La novela histórica siempre me llama y esta novela la tengo en el punto de mira. Creo que me va a gustar. Un beso.
ResponderEliminarSin duda una lectura pausada en la que disfrutar de la prosa del autor. Besos.
ResponderEliminarMe echa para atrás lo que cuentas de la prosa,por lo que esta vez lo voy a dejar pasar.
ResponderEliminarBesos
Esta novela que nos traes hoy no la veo para mí porque lo que comentas sobre la prosa poética no me convence. Besos
ResponderEliminarDavid escribe muy bien, es una delicia leerle y esta novela me ha encantado.
ResponderEliminarBesos.
Me llama la atención con todo lo que cuentas, no conozco al autor, pero lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarBesos!
hola! para buscarlo, conseguirlo y conocerlo! saludosbuhos, magnifica reseña!
ResponderEliminarMe atrae la temática, y me gusta lo que cuentas de la novela, aunque también me sorprende el estilo narrativo que eligió el autor para desarrollarla, muy poco habitual en este tipo de novelas. Besos.
ResponderEliminarNo me acaba de atraer esta novela. Por ahora no creo que la lea.
ResponderEliminarPues no tiene mala pinta y a mi la novela histórica me gusta, si se cruza en mi camino no dudare en leerla, pero con todo lo pendiente, no se cuando sera. Besinos.
ResponderEliminarHola Marina,
ResponderEliminarComo ya he comentado en otros blogs, la temática religiosa no me atrae mucho... aunque soy consciente de que uno nunca puede asegurar nada sin antes haber leído el libro, está claro...
Pero sí me gusta el hilo argumental que gira sobre el robo de arte... ;)
Hola! La verdad es que no tiene mala pinta, y por los géneros que toca creo que disfrutaría de este libro ya que suelen gustarme mucho, así que me lo llevo anotado a ver si lo consigo pronto.
ResponderEliminarBesos!
Tiene muy buena pinta esta historia a ver si tengo oportunidad de leerlo, un beso
ResponderEliminarA mí su otro libro me gustó mucho precisamente por esa prosa que destacas, aunque es verdad que en una trama así le pegaría un estilo más ágil. Aún así lo leería seguro ;)
ResponderEliminarBesitos
Lo termino hoy, y desde luego es estilo y la prosa de la autora son su mejor insignia.
ResponderEliminarUn beso ;)
Creo que coincidimos en impresiones, me ha gustado la temática, como ha jugado con nosotros, y la forma de escribir, que anima a leerlo despacito y saboreando.
ResponderEliminarBesos
Hola bonita
ResponderEliminarParece que no le falta de nada al libro, a mi me recuerda al guion de una peli. Gracias por traerlo.
Kiss.
Pues me llevo el libro, pero me animaré en otro momento, que ahora necesito lecturas más ligeras.
ResponderEliminarBesotes!!!
Lo dejo pasar que no me termina de convencer.
ResponderEliminarSaludos
ME gustó mucho y disfruté mucho la LC. Besos
ResponderEliminar¡Qué ilusión que te haya llegado un libro con todo y dedicatoria! Me encantaría algo así. La novela se ve muy bien, aunque dudo un poco por eso de prosa poética" y es que a mi la poesía no se me da, necesito instruirme mucho más en ese campo, porque todavía se me hace un poco pesada, por lo cual también puede ser una buena oportunidad de aprendizaje. Eres licenciada en Historia del arte! Me hubiera encantado estudiar eso, aunque en el momento en que tuve que decidir, esa licenciatura no estaba entre mis opciones :(
ResponderEliminarBesos!
Me has transmitido mucho interés por ese autor al que se ha comparado con García Márquez. Apunto.
ResponderEliminarUn beso.
Muy de acuerdo con lo que expones en tu reseña. Besos
ResponderEliminarCreo que con esta novela no me voy a animar.
ResponderEliminarBesos.
¡Hola! No me disgusta lo que comentas, pero creo que ahora mismo no es para mí. Quizás más tarde, quien sabe. ¡Un saludo! :)
ResponderEliminarPues, hala, otra novela a la lista de pendientes. Cómo no apuntarla después de leer tu reseña. Se presenta muy interesante. Gracias.
ResponderEliminarUn besote, guapa.
Tiene muy buena pinta Marina, no me llama tanto al mezclarlo con lo histórico, vamos que no lo pondría entre los primeros, porque yo para leer este género necesito leerlo con calma, pero sin duda parece un buen libro para tener en cuenta. B7s
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