FICHA DEL LIBRO
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Autora:
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Alicia Giménez Bartlett
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Título:
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Mi querido asesino en serie
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Serie:
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Petra Delicado 11
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Editorial:
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Destino
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Año de edición:
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2017
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Género:
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Thriller
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Páginas:
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416
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Sinopsis:
El nuevo caso de la inspectora Petra Delicado empieza cuando
encuentran el cuerpo de una mujer de unos cincuenta años asesinada de modo
brutal en su propia casa. Sobre el cadáver hay una carta de amor anónima que
reivindica el asesinato, justificándolo con el abandono del presunto asesino
por parte de la víctima. El caso lo llevan Petra, Garzón y un inspector del
cuerpo de los Mossos d’Esquadra a quien sorprendentemente, pues es más joven
que Petra, le encomiendan el mando. Todos sabemos del carácter de Petra, y en
este caso, el tesón para descubrir la intriga se verá entrelazado con su
rebelión interna frente a una situación que le resulta inaceptable: ¿cómo puede
ser que este joven mosso sea quien dé las órdenes?
Mientras tanto, siguen apareciendo cadáveres, y todo apunta a que
nos hallamos ante un asesino en serie. El misterio está servido.
Fuente:
web de editorial
Opinión
personal:
No
os podéis imaginar las ganas que tenia de leer alguna novela de la ganadora del
Premio Planeta 2015 y pionera de la novela negra española, Alicia Giménez Bartlett,
y más en concreto del personaje femenino que tanta fama le ha aportado, el de
Petra Delicado. Cuando vi entre las novedades de la editorial esta nueva
publicación, ni me lo pensé. Por eso hoy os traigo mis impresiones sobre Mi
querido asesino en serie, la undécima entrega de la serie protagonizada por
esta inspectora de la policía nacional y su incondicional escudero, el
subinspector Fermín Garzón. Un tándem que funciona a la perfección y que me ha
sorprendido por la cordial relación y gran camaradería que hay entre jefa y
subordinado.
Mientras
Petra se somete a unas sesiones reparadoras de chapa y pintura, recibe el aviso
de que una mujer de mediana edad ha aparecido asesinada en su casa adosada situada a las afueras de Barcelona. El cadáver presenta signos de ensañamiento
y va acompañado de una nota de amor que su asesino le ha colocado sobre el
pecho. Dicha nota está rubricada ficticiamente por Demóstenes, el orador más
relevante de la Grecia Clásica, muy célebre por sus discursos políticos. Todo
se complica con la aparición de otra víctima asesinada con el mismo modus operandi
y sobre la que han dejado depositada también una nota inculpatoria. Es posible
que nuestros protagonistas se enfrenten a un asesino en serie que parece haber
encontrado a las víctimas ideales: mujeres solitarias y reservadas, frágiles y
con una marcada falta de empatía social. Solamente cuentan con pruebas circunstanciales,
carecen de indicios a los que aferrarse para impulsar el caso y desvelar la
identidad de este perturbado criminal. No hay testigos ni hallazgos que
pudieran pasar por una criba científica.
Petra
es totalmente reacia a colaborar con otros cuerpos policiales, por eso no le
hará ninguna gracia cuando le informan que no será ella quien dirija la
investigación de este crimen, sino un joven inspector de la policía autonómica
catalana. Los mandos superiores de ambos cuerpos policiales han decidido que
Roberto Fraile, un mosso d´esquadra, esté al frente del caso, pero esta
situación no le parece justa a nuestra protagonista porque ella es mayor y está
más curtida en esclarecer homicidios. Petra tiene una manera muy particular de
llevar una investigación y ahora se enfrenta al temor de no saber cómo actuar.
Además, para ser sinceros, no ser la jefa le sentará como una patada en el
hígado. Paulatinamente descubrirá que la intuición, el empeño, la dedicación y
los métodos más ortodoxos de su nuevo compañero pueden ser beneficiosos para
resolver el crimen, porque aporta otra visión más actual del ejercicio policial.
Alicia
Giménez Bartlett va a desarrollar toda la trama de su novela íntegramente en la ciudad
de Barcelona y la soledad es el tema principal sobre el que pivota todo su
argumento. Desde primera hora el lector se encuentra con una premisa inquietante
que le va a mantener pegado a sus páginas: hay un asesino suelto por las calles de la
ciudad condal y está acabando con la vida de mujeres asociales. A pesar de
contar con unos cuantos crímenes, la autora no se recrea en ningún momento en
la crueldad, haciendo gala de una sutileza inteligente en las descripciones,
sin entrar en detalles escabrosos ni regodearse con la sangre. Con un estilo
narrativo muy cuidado, una excelente ambientación de los distintos escenarios
donde suceden los acontecimientos, una prosa sencilla y clara donde proliferan
los diálogos sobre la narración y capítulos cortos, la autora nos convierte en
testigos de cómo se plantea una investigación en la que las injerencias
políticas no deben interferir ni separar los dos cuerpos policiales que la
llevarán a cabo.
Los
personajes repletos de aristas e intensos, construidos contundentemente, son el
punto fuerte de esta novela en la que la investigación policial se entrelaza a
la perfección con las relaciones personales de sus personajes principales. A
través de un narrador protagonista, el de Petra Delicado, su autora nos sumerge
en una historia con un ritmo que en ocasiones se torna sosegado y con
situaciones que se repiten una y otra vez como las constantes visitas de
nuestros protagonistas a La Jarra de Oro, un bar situado frente a su lugar de
trabajo. El empleo de un narrador en primera persona, aún siendo muy
arriesgado, es ideal porque permite un acceso completo a los pensamientos y
decisiones de nuestro personaje principal, quien ha acaparado toda mi atención,
haciéndome partícipe de la cotidianidad de su vida personal. Un punto de vista
interesante porque nos revela a una mujer de mediana edad muy competente y
entregada a su trabajo, con fama de impertinente y a la que todo le resbala,
que ha pasado por dos matrimonios fallidos y ahora el tercero la colma de
felicidad. Una persona fuerte pero incapaz de sobrellevar el dolor humano. Batalladora perseverante, segura de sí misma y que nunca tira la toalla. Se
complementa a la perfección con su subordinado y juntos van a dar mucho juego
con situaciones y diálogos frescos y chispeantes, en absoluto forzados, que
están tintados de un humor inteligente y socarrón. Aunque el empleo de este
tipo de narrador tiene una parte negativa porque solo se muestra la trama desde
el punto de vista exclusivo de su personaje principal, pudiendo sesgar ciertos
matices de la historia a los que no tiene acceso.
Sintetizando:
Mi querido asesino en serie es una novela policíaca de ágil lectura y una
dosificación correcta de la tensión y el suspense, a la que se le añaden ingentes dosis de un humor
ladino e irónico que le van a restar dramatismo a la historia. Una novela con
un final sorprendente e inesperado, que muy bien puede leerse
independientemente del resto de libros que componen la serie, que recomiendo a
todos los amantes del género y a los
seguidores de este icónico personaje de la novela negra de nuestro país.
Y como siempre digo, esta es la opinión personal de una simple lectora, no de una crítica literaria.
Su autora:
Alicia
Giménez Bartlett
(Albacete, 1951). Estudia Filología Española en la Universidad de Valencia y se
doctora en Literatura Española por la Universidad de
Barcelona. En 1984 publicó su primera
novela, Exit (Seix Barral). Con Una habitación ajena (1997)
obtuvo el primer galardón literario de su carrera: el Premio Femenino Lumen.
En los años noventa crea el personaje de Petra Delicado, la popular inspectora
que ha dado pie, hasta ahora, a diez obras de la saga y a una serie de
televisión. Estas han sido traducidas a diversos idiomas, y gozan de gran éxito
en países como Italia o Alemania. En 2011 obtuvo el Premio Nadal por su obra Donde nadie te encuentre y en 2015 el Premio Planeta.
