 FICHA DEL LIBRO | |
Editorial: | |
Año de edición: | 2025 |
Páginas: | 544 |
P.V.P. | 23,90 euros |
Sinopsis:
Orán. Años 20, siglo xx. En esta ciudad africana de origen árabe, pulso español y administración francesa desembarca una joven con el falso nombre de Cecilia Belmonte. En apariencia, ha cruzado el Mediterráneo para escapar de la miseria, como tantos compatriotas. Su razón, sin embargo, es más turbia.
La urgencia por sobrevivir la obliga a dejarse la piel en plantaciones y lavaderos, como empleada doméstica y operaria de fábrica a destajo. Hasta que una madrugada, en la tabaquera Bastos, participa en un delito por el que paga con su sometimiento a un hombre despreciable. Su entereza será lo que la libere y le aporte el coraje para rehacerse y emprender un camino en ascenso, repleto de quiebros, logros y desafíos a lo largo de tres décadas vibrantes.
Esta es la historia de una mujer que vivió el auge
colonial y el trágico fin de la Argelia francesa. Y, en paralelo, sus
páginas rescatan la memoria de los desconocidos pieds-noirs españoles que,
arrastrados por la emigración y el exilio, formaron parte de aquel mundo.
Fuente: web de la editorial
Opinión
personal:
Sigo la trayectoria de esta autora desde que leí El tiempo
entre costuras, una novela debut que me encantó y con la que se ganó a
pulso un hueco en mis estanterías. Ahora vuelve con esta nueva publicación que nos
lleva hasta la Argelia colonial del siglo XX, un escenario poco transitado por
la narrativa española contemporánea, y lo hace desde una perspectiva
profundamente humana y femenina. Una historia que entrelaza realidad y ficción,
con una protagonista resiliente, y escrita con una sensibilidad que conmueve. Sin
duda, va a estar entre mis mejores lecturas del año.
Con sus miserias al hombro y sin más planes que la simple
supervivencia, miles de españoles cruzaron el mar dejando atrás una tierra que
ya no les ofrecía cobijo. Buscaban en Orán algo más que trabajo: una
oportunidad para rehacerse, aunque para ello debieron esconder su apellido,
disimular su acento o aprender a fingir que eran otros. Y es ahí donde emerge
la historia de Cecilia Belmonte, una mujer que, bajo una identidad falsa y tras
un delito que la obliga a huir de España, se sumerge entre compatriotas
errantes con la esperanza de empezar de nuevo. Pero su lucha apenas ha
comenzado y el destino se le cruzará en forma de oportunidad…
La ambientación es precisa, sin exceso descriptivo. Se nota
la labor de documentación que hay detrás, pero no pesa. Con una prosa envolvente
que avanza como el mar tranquilo y va calando poco a poco, y siguiendo la voz
intimista en primera persona de su protagonista, el alma de la novela, la
autora nos abre las puertas de la Orán de los años veinte a los sesenta. Una
ciudad colonial teñida con la luz dorada del Mediterráneo y acariciada por la
brisa de múltiples culturas, que se mueve con engranajes franceses y alma árabe.
La ciudad se convierte en un personaje más, mudo pero
esencial, con ruido de mercados y olor a pan recién hecho, el bullicio del zoco
y su puerto abierto al vaivén de quienes llegan sin saber si se quedarán. Franceses,
españoles, árabes, judíos, italianos y malteses compartían un espacio donde
cada calle olía distinto y cada idioma dejaba una estela en el aire. Un lugar
de tránsito donde la historia dejaba marca y el porvenir se escribía con acento
extranjero. Es en este escenario cálido y áspero donde Cecilia empieza a
recomponer su vida, a pesar de las grietas. A través del trabajo, del afecto de
las mujeres que la rodean y con quienes comparte no solo techo, sino vida.
Por si un día volvemos es también un homenaje a tantas mujeres anónimas que
tejieron su destino en tierra ajena, lejos de su patria, con la única compañía
de sus manos, sus recuerdos y la determinación de sobrevivir sin rendirse.
En definitiva, una novela de ficción histórica para leer sin
prisas y poder deleitarse con los cinco sentidos. Seas lector habitual de la
autora o te acerques a ella por primera vez, este viaje literario no solo te
atrapará, dejará en ti una huella profunda, como esas historias que uno lleva
consigo mucho después de haber cerrado el libro.
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He leído buenas críticas de esta novela. La apunto.
ResponderEliminarBesos.