Autor: Amy Tan
Título: El valle del asombro
Editorial: Planeta
Año de edición: 2014
Género: Narrativa
ISBN: 9780062107312
Páginas: 608
Título: El valle del asombro
Editorial: Planeta
Año de edición: 2014
Género: Narrativa
ISBN: 9780062107312
Páginas: 608
Sinopsis:
1912, Shanghái.
Violeta es la hija adolescente de Lulú, la propietaria de una casa de
cortesanas de lujo. Ambas mujeres serán víctimas de un engaño que las separará,
llevando a Lulú de vuelta a San Francisco y convirtiendo a Violeta en
cortesana. Años después, Violeta será también separada de su hija Flora, y así
las tres mujeres comparten un destino que las lleva a confrontar sus pasados, a
compartir secretos y deseos y a profundizar en la compleja relación entre
madres e hijas.
Amy Tan nos
sumerge en un mundo rico, complejo y fascinante a través de tres generaciones
de mujeres en lucha contra su destino.
Opinión
personal:
Confieso que en
toda mi vida de lectora he leído muy poco sobre la cultura china, a pesar de
que es un tema que siempre me ha interesado por las diferencias entre ésta y la
cultura occidental. Lo poco que ha pasado por mis manos no me ha defraudado.
La historia
narrada nos sitúa en la ciudad de Shanghái, en el año 1912. Allí asistiremos a
una historia generacional de logros, secretos y deseos entre una madre y su
hija. Narrado en primera persona por
Violeta, la protagonista de libro. Ella es la encargada de contarnos cómo
transcurre su vida, desde niña, en una casa de cortesanas regentada por su
propia madre, una mujer de origen norteamericano. Se intercalan también
narraciones de otros dos personajes femeninos del libro, así como una serie de
cartas entre algunos de ellos.
Violeta estará a
caballo entre dos culturas totalmente distintas, cosa que la confunde in
extremis y la obligan a buscar su sitio en el mundo para poder darle un sentido
a su vida. Cuando Violeta es apenas una adolescente, ocurre un hecho que hace
que madre e hija se separen geográficamente, y nuestra protagonista se verá
obligada a ejercer de cortesana.
Los protagonistas
rotundos de este libro van a ser mujeres, cada una de ellas con historias que
difieren entre sí, pero relacionadas con el mundo de las cortesanas chinas. Uno
de los personajes más entrañables, para mí, es el de Calabaza Mágica, quien
será la encargada de iniciar, aconsejar y cuidar de Violeta, prácticamente
durante casi toda su vida.
La idea de este
guión literario le surge a Amy Tan cuando un día, visitando la exposición de
cierto museo, descubre una fotografía en la cual aparecen dos cortesanas
posando. Dicha instantánea le trae a la memoria, por su gran semejanza, a una
fotografía que ha visto en su casa y en la cual aparece su abuela ataviada de
igual forma y con el mismo peonado que el de ambas cortesanas. Amy Tan decide
indagar en la saga de su familia, especialmente en todo lo concerniente a su abuela, llegando a una serie
de conclusiones que no os quiero revelar, pero que le sirvieron de inspiración
para dar forma a su libro.
Amy Tan nos hará
testigos de la caída de la Dinastía Ching, nos sumergirá en una sociedad
machista donde casi todos los hombres de Shanghái frecuentaban los burdeles,
conoceremos un pueblo que siente un odio exacerbado hacia los extranjeros, a
las envidias entre las cortesanas y el rápido declive de la carrera de éstas. Veremos el exotismo gracias a las
descripciones del entorno de Shanghái. Otro tema que también toca y que es muy
típico de esta cultura es el de los pies de loto. Conoceremos de primera mano
la vida de una cortesana, desde que es desflorada, a una tierna edad por un
acaudalado hombre que paga un elevado estipendio por ello, hasta que pocos años
después dejan de estar en la cúspide del negocio. Las que más suerte tenían se
casaban con algún cliente, pasando a ser concubina de éste; otras se convertían
en madamas al montar su propio negocio de cortesanas con el dinero ahorrado; y
la gran mayoría, pasaban de casas de primera a casas de segunda categoría, a
los fumaderos de opio o directamente a las calles, donde se prostituían por
poco dinero.
Vamos a ver, en
definitiva, una historia llena de sacrificios y de tragedias, de glamur,
superación y amor. Comentar, solo de pasada, la gran similitud que tiene esta
historia con la narrada en el libro de Arthur Golden y que se titula "Memorias de una geisha". Incluso hay
un personaje, en ambos libros, que comparten el mismo nombre, el de Calabaza.
Narración muy
fluida y dinámica, en la cual Amy Tan realiza descripciones amenas de las
costumbres chinas y de la ciudad de Shanghái. Hay un uso reiterativo de la
metáfora, que vemos a la hora de ponerles nombre a los diferentes locales de
cortesanas, o a la hora de nombrar posturas sexuales o zonas erógenas del
cuerpo humano, tanto femenino como masculino. Esta cultura siempre atada a los
simbolismos y en cómo afectan a la
armonía de las personas.
Es un libro que
me ha gustado, aunque hubo momentos en los que me aburría, pues la historia no
tenía ritmo alguno. Es más, quitaría una fábula, narrada por uno de los
personajes secundarios, que llega a hacerse muy pesada y que apenas aporta nada
a la narración. Además, el desenlace final es muy precipitado.
Os agradezco vuestra visita al blog así como vuestros comentarios.
A pesar de los aspectos negativos que puede tener la novela, que tenga similitud con "Memorias de una geisha" me hace que todavía me apetezca más leerla.
ResponderEliminarTendré en cuenta tu reseña cuando la lea. Gracias.
Besos.
Hay cierta similitud, aunque las costumbres de Japón y de China, en este tema, se parecen muy poco
EliminarBesos
Yo tampoco he leído mucho sobre la cultura china. Siempre he tirado más por la japonesa, pero me gustaría conocer mejor otros países asiáticos, así que me llevo anotado el título, aunque tenga algunas partes aburridas, pero parece que por lo general merece la pena.
ResponderEliminarBesos.
Si que merece la pena a pesar de todo :)
EliminarEspero que te guste, ya me contarás
Besos
No sé, me parecia interesante pero con las pegas q pones me han entrado dudas, ademas tengo alguno de este estilo todavia esperando turno. Me lo pienso... mil besos.
ResponderEliminarIsabel, lee otras reseñas antes de tomar esa drástica decisión, please. No quisiera que te perdieras este libro por mi culpa.
EliminarBesos
Tengo muchas ganas de leer este libro desde que salió a la venta y a pesar de las pegas que has señalado, a mí me sigue llamando mucho
ResponderEliminarBesos
Pues adelante con él, guapi.
EliminarYa me contarás...........
Besos
Tengo ganas del libro. Tengo Memorias de una geisha en casa, pero no lo he leído...si he visto la película...y es increíble. Te iba a decir lo de Calabaza..jaja. Vaya coincidencia de nombres.
ResponderEliminarAunque el ritmo sea lento tengo ganas de leer algo así. Ojalá pueda conseguirlo pronto.
Besos!
Estaría bien si pudieras leer ambos, así verías las diferencias que hay entre una geisha y una cortesana china
EliminarBesos
Pues creo que voy a decantarme por algún otro libro de Amy Tan. Si recuerdo a "Memorias de una geisha" prefiero leer estas y si además hay alguna parte que se hace pesada e incluso se puede saltar... Pues me salto el libro directamente.
ResponderEliminarGracias y un beso!
Tienes dos mas para elegir de esta autora. Yo solo he leído éste, pero he visto críticas por ahí que comentan que este libro pierde calidad respecto al resto de su obra.
EliminarUn besazo
No sé, me parece que lo dejaré pasar por el momento.
ResponderEliminarTe he nominado al premio Dardos en mi blog, si quieres pasarte, este es el enlace http://unlibrojuntoalfuego.blogspot.com.es/2014/03/me-han-nominado-al-premio-dardos.html
Besos!
Gracias, guapi, por la nominación. Tiro pa tu blog a verlo :)
EliminarBesos
Este libro es uno de los muchos que tengo pendientes y al leer tu post me han entrado ganas de empezarlo cuanto antes. Enhorabuena por tu blog, me gusta mucho!
ResponderEliminarMuchas gracias por pasar por aquí y por tus palabras. Espero leer en breve la reseña de este libro en tu blog.
EliminarSaludos
Hola!! Me he emocionado mucho al ver que habías reseñado este libro, a mi me ha encantado y creo que no es muy conocido (bueno no taanto como me gustaría, jaja) Yo no le quitaría nada, si que se puede hacer un poco largo y quizá lentos por momento pero en definitiva no lo cambiaría porque a mi me gusto mucho.
ResponderEliminarNo conocía la anécdota de la escritora, gracias por compartirla.
Saludos!!