A grandes males - César Pérez Gellida

FICHA DEL LIBRO
Autor:	César Pérez Gellida
Título:	A grandes males
Editorial:	Suma de letras
Año de edición:	2017
Género:	Thriller
ISBN:	9788491291114
Páginas:	682

Sinopsis:

Erika Lopategui y Ólafur Olafsson han llegado a Buenos Aires siguiendo el rastro de la única persona que puede ayudarlos a destapar la organización criminal que se esconde tras la Congregación de los Hombres Puros. Encontrar el Cartapacio de Minos, un misterioso documento que contiene la identidad de los integrantes de la cúpula de esta organización, es su única meta.

Pero no solo ellos lo buscan... Pronto descubrirán que una cara conocida está más cerca de lo que a ellos les gustaría.

A grandes males es un thriller donde la realidad y la ficción se confunden para sumergir al lector en una trama cargada de incógnitas cuyas respuestas se encuentran entre los muros del edificio Barolo, un rascacielos levantado para albergar las cenizas de Dante Alighieri.

Opinión personal:

Por fin llegó a nuestras manos "A grandes males", la novela que pone punto final a la trilogía "Refranes, canciones y rastros de sangre". La congregación de los Hombres Puros es la línea argumental que unifica esta trilogía. Si en "Sarna con gusto" se intuía que esta organización criminal iba a dar mucho juego en futuras publicaciones, en "Cuchillo de palo" se convirtió en uno de los dos hilos conductores de la trama. En esta última entrega que os traigo hoy copa por completo toda la historia, siendo el tema central de la novela.

Si hubo un país donde la masonería se hizo más patente fue en Argentina, que en los albores del siglo XX despuntaba como una de las economías más fuertes y en vías de desarrollo. Por esto la trama de "A grandes males" se va a desarrollar, casi íntegramente, en ese país. Nos vamos a encontrar con dos líneas argumentales alejadas en el tiempo.

Buenos Aires, 1922. Luis Barolo, un inmigrante italiano que cruzó el Atlántico buscando mejorar su calidad de vida, se ha convertido en uno de los empresarios textiles más prósperos de la ciudad y contrata los servicios del famoso arquitecto Mario Palenti. Juntos van a construir el Palacio Barolo, un edificio que hará de mausoleo para albergar los restos de Dante. Un templo oculto a la vista de todos los que no están versados en las ordenes masónicas, y entre cuyos muros encontraremos las respuestas que necesitamos para desentrañar todos los misterios que se van a plantear en la novela.

Buenos Aires 2013. Hasta la capital argentina se van a desplazar Erika Lopategui y Olafur Olafsson para dar con el paradero de alguien que representa una amenaza para los intereses de la Congregación y que puede ayudarlos a encontrar el Cartapacio de Minos, un enigmático documento en el que figuran los nombres de todos los componentes de esta organización criminal. El objetivo es Alcidas Edgardo Bujalesky, uno de los mayores expertos en el estudio de la masonería y del universo de Dante. Deberán dar con su paradero antes de que lo haga la congregación y poder así desmantelarla. La investigación los conduce hasta el Palacio Barolo, un rascacielos diseñado por Mario Palanti que fue miembro de la Gran logia de los Puros. Este edificio contiene muchas analogías y referencias a la Divina Comedia y nuestros protagonistas deberán interpretar su simbología.

Manifiesta es la rotundidad con la que César construye todos sus personajes, tanto los principales como los secundarios, dotándolos de vida, haciéndolos accesibles, reales y creíbles, con sus luces y sus sombras, sobre todo a nivel psicológico. Pero en esta ocasión Sancho va a perder cierto protagonismo y no aparece hasta que la trama está bien avanzada, convirtiéndose casi en un personaje secundario. Mencionar aquí a alguien que me ha encantado y cuya aparición, principalmente en el glaciar Perito Moreno, aporta acción y ritmo a la trama. Me refiero al sicario arcángel Gabriel, un ser enigmático, silencioso, marmóreo, una albina de infancia tortuosa y rodeada de cierto halo de misterio, que podría dar mucho juego en una futura novela.

A grandes males es una novela diferente al resto de la trilogía. Es un thriller de acción con pinceladas de aventuras, algo de histórica y ligeros toques de romanticismo. El autor se vale de un narrador en tercera persona para mostrarnos los diferentes puntos de vista de todos sus personajes, permitiendo el avance de cada una de las líneas argumentales y contribuyendo a agilizar el ritmo. Con un estilo directo, un lenguaje cuidado y contundente, y una narrativa muy audiovisual, César nos provoca y juega con nosotros. Por supuesto que la música no podía faltar en esta entrega, siendo esta vez más especial porque las canciones han sido escritas por el propio autor, algo muy meritorio y digno de tener en cuenta. Espero que César no se plantee la idea de dedicarse a la composición de canciones, dejando de lado la escritura, porque entonces me da algo.

César ha llevado a cabo un gran trabajo de documentación que vamos a ver plasmado en la excelente ambientación de los diferentes escenarios donde se desarrollan los acontecimientos. Consigue recrear el entorno con tal realismo, que parece que te encuentres allí mismo, inmerso en los lugares más emblemáticos de Buenos Aires, o en el helado y sobrecogedor glaciar Perito Moreno, o huyendo de la pestilente y desoladora Villa 31, un asentamiento marginal donde la miseria y la delincuencia campan a sus anchas.

Cada vez que leo en la sinopsis de un libro que la trama guarda relación con Dante Alighieri y con su Divina Comedia me tiemblan las piernas, porque es una temática que aborrezco de lo manida que está. Reconozco que César ha intentado sintetizar y abreviar los datos al máximo para no abrumar al lector y ralentizar el ritmo narrativo. Para ello ha incluido también a dos personajes que, con cierta chanza y mucha sorna, tratarán de hacernos más llevaderos esta parte más espesa. La verdad es que he quedado estragada de órdenes masónicas, logias secretas y dantismo.

En resumen, A grandes males es un thriller de suspense y aventuras, aderezado con ligeros toques de novela histórica y una pizca de romanticismo. Estamos ante una novela con giros argumentales inesperados y sorprendentes, con un ritmo constante y estructuralmente perfecta. Una lectura que recomiendo encarecidamente siempre y cuando hayamos leído con anterioridad las anteriores entregas de esta trilogía. Esta vez sí que ¡hay que joderse! porque se acabó lo que se daba… o quizás no. Tan solo la intrincada imaginación de su autor tiene la respuesta. 

Y como siempre digo: esta es la opinión de una simple amante de la lectura, no de una crítica literaria.

Su autor:

César Pérez Gellida (Valladolid, 1974). Es Licenciado en Geografía e Historia por la Universidad de Valladolid y Master en Dirección Comercial y Marketing por la Cámara de Comercio de Valladolid. Ha desarrollado su carrera profesional en distintos puestos de dirección comercial, marketing y comunicación en empresas vinculadas con el mundo de las Telecomunicaciones y la Industria Audiovisual (películas y videojuegos) hasta que en 2011 decidió trasladarse con su familia a Madrid para dedicarse en exclusiva a su carrera de escritor. Memento mori es su primera obra de una prometedora producción novelística que cosechó grandes exitos tanto de ventas como de críticas y obtuvo el Premio Racimo de Literatura 2012. constituía la primera parte de la trilogía Versos, canciones y trocitos de carne, que continuó con Dies irae y se cerró con Consummatum est, por la cual le fue otorgada la Medalla de Honor de la Sociedad Española de Criminología y Ciencias forenses 2014.