Bajo aguas oscuras - Robert Bryndza

FICHA DEL LIBRO
Editorial:	Principal de los Libros
Año de edición:	2022
Páginas:	312
P.V.P.	17,90 euros
Traductor:	Auxiliadora Figueroa

Sinopsis:

Cuando la detective Kate Marshall encuentra el cuerpo sin vida de un joven en el embalse de Shadow Sands, las autoridades califican el suceso como un «trágico accidente». Sin embargo, algo no cuadra. ¿Qué hacía allí en mitad de la noche? ¿Y cómo pudo ahogarse si era campeón de natación? Pronto, las pruebas llevarán a Kate y a su socio, Tristan Harper, hasta un descubrimiento mucho más oscuro: la víctima de Shadow Sands es solo la última de una serie de misteriosas muertes que se remontan décadas atrás y que guardan relación con un asesino legendario que se oculta entre la niebla del embalse. Poco después, otra mujer desaparece, y Kate sabe que solo es cuestión de tiempo que el asesino vuelva a matar, por lo que deberá actuar rápido para evitarlo. Lo que Kate desconoce es que el escurridizo asesino en serie al que persigue no es el único que va un paso por delante de ella: alguien más intenta asegurarse de que los secretos de Shadow Sands permanezcan ocultos bajos sus aguas oscuras.

Fuente: web de la editorial

Opinión personal:

Robert Bryndza es un habitual de mis estanterías y nunca me ha decepcionado. He disfrutado, en mayor o menor medida, de los cinco libros de su serie protagonizada por Erika Foster. A principio de año descubrí que el autor publicaba “La noche más oscura”, otra serie diferente que también tiene como protagonista a una mujer, aunque en esta ocasión es una expolicía reconvertida en detective privada, por lo que no me pude resistir. Hoy os traigo mis impresiones sobre “Bajo aguas oscuras”, una novela de suspense y amena lectura que me mantuvo pegada a sus páginas desde su inicio. Aunque este libro es la segunda entrega de la serie, se puede leer independientemente, pero no lo recomiendo porque os perderéis muchos matices claves de la trayectoria vital de su protagonista.

Finales de verano de 2012. Kate Marshall se encuentra en el embalse de Shadow Sands practicando submarinismo con su hijo adolescente cuando descubren el cuerpo de un joven en las profundidades. Supuestamente se ahogó de manera accidental, pero su madre no está tan segura y pide ayuda a Kate, quien iniciará una investigación en compañía de su socio Tristan Harper. Hay muchas cosas en el caso que carecen de sentido y cuando desaparece, sin dejar rastro, una profesora de la universidad donde trabajan nuestros protagonistas, Kate se verá sumida en una carrera contrarreloj para atrapar al responsable y evitar una muerte más...

Esta es grosso modo la interesante premisa de una novela con mucho potencial, aunque no ha resultado ser uno de los mejores libros de Robert Bryndza. A golpe de capítulos de corta extensión, lo cual le imprime fluidez a la lectura, y de una prosa carente de artificio, el autor ha pergeñado una trama articulada en dos hilos narrativos que van a fluir alternativamente: el de la investigación llevada a cabo por Kate y Tristán, combinada con capítulos focalizados en la persona secuestrada y su lucha por la supervivencia. Este cambio de perspectiva es un signo de identidad de Robert, un recurso que utiliza en algunos de sus libros para aumentar la tensión y el suspense, aunque en esta ocasión, y para mi gusto, se ha quedado corto. También añade la perspectiva del asesino, pero el lector no va a conocer su identidad hasta el final, lo que dará pie a que haga sus propias conjeturas a lo largo de toda la lectura.

A diferencia de la primera entrega, la vida de Kate no es el foco principal de la historia. A pesar de continuar lidiando con los fantasmas de su pasado, y que su lucha diaria contra el alcoholismo se siente muy real, aunque un tanto repetitiva, en este nuevo libro se nos desvela algo más de la vida personal de Tristan y seremos testigos de cómo Jake, el hijo de Kate, comienza a tomar conciencia de ser el hijo de quien es. Todos los protagonistas tienen sus propios desafíos a los que enfrentarse, lo cual nos permitirá conocerlos algo mejor. Al igual que Erika, la protagonista de la otra serie del autor, Kate es una mujer con un pasado complicado, pero que logró levantar cabeza y empezar a ver la luz al final del túnel. Capturar al Caníbal de Nine Elms fue su mayor triunfo, pero también su mayor error. Él era la persona a la que culpaba de todo: su bajada a los infiernos, el final de su carrera como policía, su dependencia del alcohol y su turbulenta relación con su hijo, quien ha permanecido bajo la tutela legal de los abuelos desde que tenía seis años y con el que parece estar recuperando el tiempo perdido.

Sintetizando: “Bajo aguas oscuras” es la segunda entrega de una serie que perfectamente puede leerse de manera independiente, aunque no lo recomiendo porque os perderéis el trágico pasado de su protagonista, que ha condicionado su presente y su futuro. Una novela de suspense de entretenida lectura y escrita con un estilo que fluye tan fácil que te engancha desde su inicio. Un libro que recomiendo si te gusta este género literario.

Y como siempre digo, esta es la opinión personal de una simple lectora, no de una crítica literaria.

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