Autor: Juliette Morillot
Título: Las orquídeas rojas de Shanghai
Editorial: Debolsillo
Año de edición: 2001
Género: Novela Histórica
ISBN: 9788497932288
Páginas: 450
Sinopsis:
Basada en una
historia real, la de una mujer coreana que durante la guerra con Japón formó
parte de las mujeres esclavas sexuales del ejército nipón. El testimonio
de Sangmi, enrolada a la fuerza a los catorce años por los soldados japoneses
durante la colonización de Corea, es una cruda y valiente narración sobre la
infinita fortaleza humana ante el desafío de la humillación y el horror.
Opinión
personal:
Elegí la lectura
de Las orquídeas rojas de Shanghai como broche final para la yincana que han organizado Kayena, del blog Negro sobre Blanco y Carmina, del blog De tinta en vena.
Jamás imaginé
que me tendría que enfrentar a una lectura tan dramática, tan dura y
desgarradora. Es una historia real que está basada en el testimonio de una mujer que
pasó por este infierno. La autora, Julliette Morillot, nos detalla en este libro
la magnitud del holocausto chino, acontecimiento del que no tenía ni idea y era
totalmente desconocido para mí. Esta es la vergonzosa historia de los peores
abusos a los derechos humanos cometidos por los japoneses en los territorios
ocupados durante la expansión de su imperio y hasta la Segunda guerra mundial. Al
igual que los nazis, crearon campos de concentración y realizaron experimentos médicos
utilizando a las personas como cobayas humanas. En el año 1910 Corea dejó de
existir para convertirse, ante la indiferencia de las naciones occidentales, en
una provincia del imperio japonés.
La protagonista
de Las orquídeas rojas de Shanghai es Sangmi. Su vida nunca fue un camino de
rosas, entre otras cosas porque su madre nunca la quiso. Jamás mostró
sentimiento alguno hacia ella y su padre hacía caso omiso a los suyos con fría
arrogancia, doblegándose mansamente ante la fuerza imperialista nipona. Los únicos
que la amaron de verdad fueron sus abuelos. Poco antes de morir, su abuelo le cuenta su origen, y la pequeña podrá
comprender muchas cosas que se escapaban a su entendimiento.
Tras un
desagradable incidente, Sangmi será exiliada a la ciudad de Mokpo, siendo acogida
por una familia que se dedicaba a la venta de croquetas de crustáceos. Un día
decide ir al templo, buscando un consuelo que el mundo no le proporcionaba, y
es secuestrada. Capturada a la fuerza y en contra de su voluntad, será obligada
a prestar servicio como esclava sexual para el ejército imperial japonés. Con apenas
14 años, le robaron toda su inocencia.
La pequeña será
obligada a llevar una vida de vulgar prostituta al servicio del enemigo y lejos
de su Corea natal, en tierras extrañas. Sangmi formará parte de las llamadas
"estaciones de consuelo", destinadas exclusivamente al alivio sexual
de los soldados. Estas estaciones del sexo estaban en todos los frentes y en la
retaguardia de las líneas de batalla.
Jóvenes destinadas a las "estaciones de consuelo" |
Las orquídeas
rojas de Shanghai está narrado en primera persona por su protagonista principal.
Es una novela tremendamente descriptiva, con escasos diálogos y dividido en
cinco partes que se corresponden con épocas de la vida de Sangmi. La autora ha
conseguido realizar una excelente ambientación, consiguiendo que el lector se
sumerja en la miseria de sus calles y en los ambientes oprimidos de las
ciudades donde se va a desarrollar la acción. En el contexto histórico se
aprecia la rigurosa labor de investigación que llevó a cabo Juliette Morillot. La
protagonista de la narración pasa por muchas penalidades, será testigo de infinidad de asesinatos, pero gracias a su
fortaleza mental, a su valentía y a la amistad con otras chicas, que fueron sus
compañeras de fatigas, podrá continuar adelante si volverse loca. A pesar de
ser una historia tan dura y dramática, la novela está narrada con mucha
sensibilidad.
En Las orquídeas
de Shanghai está muy presente la otra cara de la guerra, la de la bajeza
humana. Es una historia que te hace
recapacitar sobre los limites hasta donde puede llegar el ser humano. A
pesar de ello hay siempre un hueco para la amistad, el amor y la solidaridad.
En definitiva, si
buscáis una lectura que os acerque en primera persona al holocausto del pueblo
chino, visto desde una perspectiva desgarradora y vergonzosa, os recomiendo la
lectura de este libro. Pero quiero que tengáis en cuenta que su lectura no es
nada fácil, no es apta para personas
muy sensibles.
Su autora:
Juliette Morillot nació
en Bar-Le-Duc (Lorraine, Francia). Hasta hace poco vivía en Boston y
recientemente se ha trasladado a Zurich. Periodista y escritora, es ante
todo una especialista en Corea, país en el que ha vivido durante varios años y
que visita con frecuencia. En 1995, conoció en Seúl a una antigua esclava
sexual. Conmovida por el testimonio de su vida, escribió Las orquídeas
rojas de Shanghai.
Esta reseña participa en la yincana criminal y el requisito a cumplir es: la acción transcurre en China o su autor es asiático.