Editorial: | |
Año de edición: | 2022 |
Páginas: | 544 |
P.V.P. | 20,81 euros |
Traductor: | María Lidia Vázquez |
Sinopsis:
Fue en enero de 2003. En el buzón de la casa familiar
apareció una extraña postal sin firma: en el anverso, la Ópera Garnier, y en el
reverso, cuatro nombres, los de los bisabuelos maternos de Anne Berest —Ephraïm
y Emma—, y los hijos de estos —Noémie y Jacques—, todos ellos fallecidos en
Auschwitz en 1942. ¿Quién envió la tarjeta y con qué siniestra intención?
Veinte años después, la autora decide averiguarlo y remontarse un siglo atrás
para reconstruir el periplo vital de los Rabinovitch: su huida de Rusia, su
viaje a Letonia, Palestina y París, y luego la guerra. Una investigación
exhaustiva y apasionante, para la cual cuenta con la ayuda de su madre, un
detective privado y un grafólogo, y que la llevará a interrogar a los
habitantes del pueblo donde sus parientes fueron detenidos, a buscar indicios
en los libros y a ahondar en la vida de la única superviviente de la saga: su
abuela Myriam.
Fuente: web de la editorial
Opinión personal:
Me cuesta mucho resistirme a los libros que incluyen en su
argumento el nombre de algún campo de concentración. Siempre me preparo para lo
peor, descubrir tragedias con nombres propios, que deben salir a la luz para
que no se vuelvan a repetir. Hoy os traigo mis impresiones sobre “La postal”,
una novela con la que su autora, hija y nieta de supervivientes, busca los
orígenes de su familia, que se inscribe en la convulsa historia europea del
siglo XX. No es solo una novela con sutiles pinceladas de misterio, sino un
testimonio de la Segunda Guerra Mundial y del exterminio de los judíos.
En enero de 2003, entre las tradicionales tarjetas navideñas,
una factura de gas y algún que otro folleto publicitario, llegó al buzón de Lèlia,
la madre de la autora, una postal anónima. Tenía tan solo cuatro nombres
escritos, uno debajo de otro: Ephraïm, Emma, Noémie y Jacques. Eran los nombres
de sus abuelos maternos, su tía y su tío. Todos ellos fueron deportados y
murieron en Auschwitz en 1942. La tarjeta databa de los años noventa. ¿Quién la
envió? ¿Y con qué propósito? Más de una década después, será Anne Berest quien
tome el relevo de la investigación que ya inició su madre, para encontrar al
autor de la postal.
Un aviso a navegantes, este no es un libro sobre el
Holocausto, sino la investigación de una historia familiar. Un viaje vital que
nos llevará desde tierras rusas, de donde es originaria la familia de la
autora, a Normandía, pasando por Letonia, Polonia, Palestina y finalmente
París. Alternando pasado con presente en un mismo capítulo, la autora
reconstruye y da vida a estos familiares que no llegó a conocer, los
Rabinovitch, judíos rusos que iniciaron un largo periplo huyendo de su país
durante la revolución en 1919, migrando a Francia, donde tuvieron un trágico
final. No os asustéis, que esto no es un spoiler sino un dato incluido en la
sinopsis del libro. Los bisabuelos de la escritora y dos de sus hijos perecieron
en los campos de concentración, Solo Myriam, su abuela, escapó de la
deportación. A través de ellos pretende mantener viva su memoria, acercarla a
los oídos de las generaciones que no han vivido este conflicto.
Con un estilo propio y una cadencia sosegada, será la voz
intimista de la autora la que en primera persona impulse esta reconstrucción de
su historia familiar, cobrando entonces sentido su presente. Buscará respuestas
para deshacer un largo silencio y logrará este cometido partiendo de fotos con
anotaciones indescifrables, fragmentos de confidencias de su abuela apuntados
en trocitos de papel, el acceso a los archivos franceses o a los testimonios
del Museo de Historia del Holocausto y otros tipos de documentos de muy diversa
índole.
“La postal” es una novela conmovedora en la que algunos de
los episodios descritos me llegaron a emocionar porque son desgarradores y
versan sobre los campos de internamiento franceses y el regreso de los
deportados a París tras su liberación. Con estos últimos se me llegaron a
escapar algunas lágrimas. Una historia familiar tejida en base a unos hechos
reales recopilados por Lélia, la madre de la autora, en la que se ponen de
relieve temas como la identidad judía, centrando su atención en que el
sentimiento antisemita no es solo una cosa del pasado, puesto que aún sigue
presente.
Sintetizando: “La postal” es el relato íntimo de una investigación
genealógica llevada a cabo por la propia autora para conocer la historia de unos
antepasados que fallecieron en Auschwitz. Una interesante y entretenida lectura
con la que pretende entender su identidad, de dónde proviene, y dar voz a los
millones de judíos abocados a la persecución y al exterminio. Si quieres
conocer la historia de esta familia que tanto padeció, esta novela es para ti.
Hola Marina, pues es que a mí las historias de la II Guerra Mundial y del Holocausto me saturan... Así que este lo dejo pasar.
ResponderEliminarUn besazo
Te entiendo perfectamente, hay temas que cansan si lees con asiduidad sobre ellos. Mejor variar de época histórica, jeje. Besos
EliminarEs un tema sobre el que me gusta leer, así que bien apuntado me lo llevo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Pues no sabes cuanto me alegro porque seguro que te gusta mucho. Besos
EliminarQue la autora sea la protagonista de esta búsqueda genealógica para enterder sus orígenes se ve interesante, anotado queda. Un beso
ResponderEliminarSi que lo es, además te hace testigo de todo el trabajo de recopilación de datos que ha llevado a cabo. Espero que te animes. Besos
EliminarHola, Marina.
ResponderEliminarA este libro ya le tenía echado el ojo y espero hacerme pronto con él. Besos
Hola, Graciela. Espero que me cuentes entonces qué te ha parecido esta investigación genealógica ded la autora. Besos
EliminarNo me agrada mucho leer sobre el tema del holocausto, aunque tengo muy claro que no debemos olvidar nada de lo que ocurrió para que no se vuelva a repetir. Un beso
ResponderEliminarTampoco es una época de la historia que le agrade a nadie, pero siempre es bueno que salgan a la luz los acontecimientos para que no se vuelvan a repetir. Besos
EliminarResulta irresistible esa postal y esa investigación acerca de la propia familia, sobre todo, cuando la investigación lleva a hechos tan especiales y dolorosos. Apuntada queda.
ResponderEliminarUn beso.
Es una bonita historia familiar, Rosa, a ti seguro que te gusta. Besos
EliminarBuenas tardes, Marina.
ResponderEliminarLa novela me llama mucho la atención y seguro que es interesante la historia de los antepasado de esta escritora, pero por ahora solo apunto tu recomendación porque tengo un par de libros pendientes y no compraré más hasta que no les haya dado boleto. Besos
Hola, Carmen.
EliminarAy, ojalá esa lista de libros pendientes mengüe pronto y te animes con ella. Besos
Parece uno de esos libros que se te meten dentro, difíciles de olvidar. Lo único que me echa para atrás es esa cadencia sosegada.
ResponderEliminarBesos
Lo cierto es que el ritmo es pausado, pero el tema que toca es de los que a ti te gustan y seguro que la disfrutarías. Besos
EliminarEste tipo de historias me pierden, me lo llevo anotado ^^
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