La cara norte del corazón - Dolores Redondo

FICHA DEL LIBRO
Editorial:	Destino
Año de edición:	2019
Páginas:	688
P.V.P.	22,90 euros

Sinopsis:

En agosto de 2005, mucho antes de los crímenes que conmocionaron el valle del Baztán, una joven Amaia Salazar de veinticinco años, subinspectora de la Policía Foral, participa en un curso de intercambio para policías de la Europol en la Academia del FBI, en Estados Unidos, que imparte Aloisius Dupree, el jefe de la unidad de investigación. Una de las pruebas consiste en estudiar un caso real de un asesino en serie a quien llaman «el compositor», que siempre actúa durante grandes desastres naturales atacando a familias enteras y siguiendo una puesta en escena casi litúrgica. Amaia se convertirá inesperadamente en parte del equipo de la investigación que les llevará hasta Nueva Orleans, en vísperas del peor huracán de su historia, para intentar adelantarse al asesino...

Pero una llamada de su tía Engrasi desde Elizondo despertará en Amaia fantasmas de su infancia, enfrentándola de nuevo al miedo y a los recuerdos que la dotan de un extraordinario conocimiento de la cara norte del corazón.

Fuente: web de la editorial

Opinión personal:

Aloisius Dupree, un enigmático agente del FBI que aparece esporádicamente en forma de llamada telefónica y a horas intempestivas en cada una de las entregas de la trilogía de Baztán y que siempre me intrigó. En más de una ocasión he comentado que este personaje podría dar mucho juego en una novela. Y esa novela ya está aquí bajo el título de "La cara norte del corazón", la nueva publicación de Dolores Redondo, la precuela de la trilogía protagonizada por la inspectora Amaia Salazar y cuya acción se desarrolla en Nueva Orleans, el único lugar de Estados Unidos donde los cementerios no se llaman cementerios sino ciudades de los muertos.

Antes de comenzar con mis impresiones quisiera hacer un inciso que, como siempre, es solo una opinión personal: si no habéis leído aun la trilogía pero tenéis pensado hacerlo, os recomiendo posponer la lectura de esta nueva publicación porque en ella vais a encontrar una serie de spoilers sobre la infancia de su protagonista que, si bien son necesarios para que un neófito pueda entender ciertos matices de la personalidad de su protagonista, nos pueden revelar información crucial que minimizaría el factor sorpresa en las anteriores novelas.

Dolores Redondo ha querido vertebrar esta historia en dos líneas argumentales alejadas en el tiempo, y que tienen como nexo de unión el personaje de Amaia. La narrativa se irá alternando entre 1992, en Elizondo, y agosto de 2005, en Nueva Orleans. Esta última acapara el grueso de la trama y transcurre a lo largo de diez días, comenzando en vísperas de uno de los fenómenos naturales más destructivos de la historia de Estados Unidos: el huracán Katrina. En ella la subinspectora de la policía foral Amaia Salazar se encuentra en la Academia del FBI, en Quántico, realizando un curso impartido por Aloisius Dupree, quien dirige uno de los tres grupos de trabajo de campo de la Unidad de Ciencias del Comportamiento. Gracias a su intuición e instinto, nuestra protagonista se integrará temporalmente en el equipo de Dupree para dar caza a uno de los asesinos en serie más buscado del país, "el compositor". Su modus operandi es siempre el mismo, amparado en los desastres naturales. Todo parece indicar que el homicida se dispone a actuar de nuevo, de ahí la celeridad por atraparlo.

En lo referente al hilo argumental que, a modo de flashback, transcurre en Elizondo, se nos desvela algún que otro episodio desconocido de la infancia de Amaia, como las razones que hicieron que su tía Engrasi decidiera alejarla lo más posible de Elizondo, pero también contiene algunos spoilers para quien no haya leído la trilogía. Será una llamada desde España, portadora de malas noticias, la que hará resurgir los fantasmas del pasado de Amaia, reabriendo viejas heridas. Conoceremos a una niña que se vio avocada a erigir una barrera amnésica alrededor de su dolor, lo suficientemente fuerte como para impedirle recordar cierto suceso. Recuerdos que pueblan sus pesadillas, pugnando por salir a la luz. Su traumático pasado forjó su presente y ahora ella es una mujer valiente, una superviviente que decidió su destino y lo dará todo por salir airosa en este caso al que se enfrenta.

Más o menos a mitad de la historia, la autora introduce una trama secundaria inconexa con la principal y con cierto calado folclórico de fondo, leyendas y supersticiones, que no ha terminado de convencerme pero que probablemente sea el punto de partida de una futura entrega. En este momento de la lectura, tanto el ritmo como la tensión narrativa comenzaron a diluirse.

Es indudable que el estilo y la calidad literarios han mejorado y queda demostrado notoriamente en este nuevo libro en el que uno de los puntos fuertes es la ambientación, cartografiada con precisión gracias a una exhaustiva labor de documentación llevada a cabo por la autora, que recreada con las descripciones justas y explícitas, se torna muy vívida y nos traslada hasta el mismo corazón de Nueva Orleans, en vísperas de la peor devastación que sufrió la ciudad por un fenómeno natural. Hasta un escenario caótico de dimensiones sobrecogedoras en el que reina la anarquía y el caos es total. Nos hace partícipes de la magnitud de la destrucción al paso del huracán, del trágico silencio de una ciudad anegada por las aguas, del desastre humanitario, del dolor y sufrimiento de una población que fue obligada a dejarlo todo atrás y abandonada por las autoridades de su país. Una ciudad sin energía, teléfono ni agua potable, con sus calles convertidas en letrinas infectas de deshechos de todo tipo, así como de cadáveres y con el agravante de unas temperaturas muy elevadas. Un verdadero infierno de lluvia y oscuridad en el que se luchará por la supervivencia.

Con una narración fluida y muy visual, de la mano de un narrador omnisciente que oscila el foco de la acción de un personaje a otro, con un ritmo discontinuo, semejante al de una montaña rusa que en ocasiones se ralentiza para coger fuerza y precipitarse posteriormente, y algunos capítulos que pueden ser obviados porque no aportan nada a la trama principal, Dolores Redondo ha pergeñado una sólida historia con una premisa basada en los crímenes reales de un asesino en serie, imprevisible y efectista, revelándose en ella las miserias del alma humana, que muestra su rostro más ponzoñoso una y otra vez. Me ha gustado conocer algo más al misterioso Aloisius Dupree, aunque se me ha quedado corto. Hubiese preferido que Dolores se adentrase más en este personaje que se convirtió en el mentor de Amaia. Un hombre sencillo, de talante analítico y marcado por el dolor de un suceso ocurrido en su infancia.

Sintetizando: "La cara norte del corazón" es la precuela de la trilogía de Baztán, una novela negra que transcurre en la ciudad de Nueva Orleans, en los días previos y posteriores al paso del peor huracán de su historia, el Katrina. Una historia con una ambientación sobresaliente que te atrapa desde sus primeras páginas como en una tela de araña, acrecentando tus ansias por saber cómo finalizará todo, con una cadencia marcada que se ralentiza en cierto momento con la inclusión de una subtrama aparentemente inconexa con el resto. Un libro que recomiendo a todos los lectores de este género literario, en el que destaca la capacidad de su autora para transmitir mucho con las palabras justas, haciendo que en ocasiones me emocionase y aflorase alguna lágrima.

Y como siempre digo, esta es la opinión personal de una simple lectora, no de una crítica literaria.

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